La reorganización del gabinete nacional antes de las elecciones
Por Martín Amil
Según el estudio realizado, la coalición FDT la conformación un “núcleo duro” de poder constituido por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el presidente Alberto Fernández y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa.
Mucho se ha hablado sobre los roles de los miembros que componen la coalición FDT, hasta se ha tratado de instalar que el presidente Alberto Fernández es un “títere” y remite a los caprichos de la Vicepresidenta. Lo cierto es que al momento de analizar la conformación de la coalición FDT, abordándolo desde las designaciones del gabinete nacional, se puede observar un tipo de composición transversal, que en principio indicaría cierto equilibrio en la relación de poder (según caudal de votos y fuerza legislativa) de cada fuerza dentro de la coalición.
La coalición FDT se la puede caracterizar como una alianza de gobierno amplia y heterogénea, tanto en términos ideológicos como partidarios, y ello se refleja principalmente en la composición del Poder Ejecutivo, donde los gabinetes ministeriales representan un espacio de división del trabajo político (gestión) y reparto del poder. De acuerdo a un relevamiento que efectuamos, con el fin de establecer una primera aproximación a la composición del gabinete nacional en el primer año del gobierno de Alberto Fernández, podemos inferir al interior de la coalición FDT la conformación un “núcleo duro” de poder constituido por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el presidente Alberto Fernández y el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. En el cuadro 1 describimos de manera más amplia los diferentes loteos ministeriales en su composición de acuerdo a ministros y segundas líneas (secretarios/as o vice ministros/as), funcionarios fundamentales en el peso de la composición de las alianzas de Gobierno; ya que tanto los ministros como los vice ministros responden a la misma lógica política partidaria de designación.
Cuadro 1: Conformación gabinete primer año coalición FDT.
A medida que corrían los meses del primer año de Gobierno, Covid 19 mediante, se fueron evidenciando tensiones dentro de la coalición en referencia a algunos ministerios donde se criticaba principalmente el desempeño de los titulares de la cartera. Como señaló en una oportunidad la Vicepresidenta, hay lugares ocupados por “funcionarios que no funcionan”.
Las primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO) aceleraron ciertas demandas del sector Kirchnerista que solicitaban cambios en algunas carteras.
Los primeros cambios del gobierno de la coalición FDT se produjeron en dos ministerios muy sensibles para frente Kirchnerista: el Ministerio de Justicia y el Ministerio de desarrollo Territorial y Hábitat; ambos inicialmente ocupados por funcionarias allegadas al Presidente. Sin embargo, cuando fueron apartadas las funcionarias de sus cargos, los porotos en juego fueron a parar a las arcas del ala Kirchnerista que logró imponer dos referentes propios.
Las primarias abiertas simultáneas y obligatorias (PASO) aceleraron ciertas demandas del sector Kirchnerista que solicitaban cambios en algunas carteras. Los resultados negativos fueron oportunos para terminar de penetrar las redes de contención del ala “Albertista” que resistía hace tiempo los embates de uno de sus socios mayoritarios.
Se reorganizó el gabinete nacional con funcionarios de amplia trayectoria política en seis ministerios: Juan Manzur asumió como Jefe de Gabinete de Ministros; Santiago Cafiero fue al Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto; Aníbal Fernández se hizo cargo del Ministerio de Seguridad; Julián Domínguez del de Ganadería, Agricultura y Pesca; Jaime Perzyck fue a Educación y Daniel Filmus a Ciencia y Tecnología.
Tal como ocurrió en los primeros reemplazos ministeriales, las nuevas designaciones beneficiaron al frente Kirchenrista, que logró consolidar nuevos espacios en el Poder Ejecutivo. Por un lado, en cuanto a la designación en el Ministerio de Seguridad, Aníbal Fernández (Kirchnerista de primera hora) que vuelve a ocupar un lugar en el Poder Ejecutivo y podría oficiar como mediador de cierto equilibrio entre los sectores del oficialismo. Por el otro, la designación Jaime Perczyk en Educación, que responde directamente al Kirchnerismo. Las pérdidas del “Albertismo” en estos ministerios se expresan con las salidas de Sabina Frederic de Seguridad, y de Nicolás Trotta de Educación.
Si bien el Presidente logró retener otros ministros cuestionados por el Kirchnerismo, entre ellos Matías Kulfas y Matías Lammens, quedaría por ver qué ocurre luego del 14 de noviembre y cómo afectará a la composición del gabinete los resultados de las elecciones generales. Estimamos que la lucha por el poder por los espacios decisivos estará sujetos a los resultados de las elecciones generales de medio término.
Martín Amil es Licenciado en Estudios Políticos. Ver más