Internacionales

Cambio climático: el desastre de Buffalo en EEUU

El cambio climático avanza sobre las poblaciones mundiales, afectando la vida de millones de personas. Buffalo fue la víctima de una tormenta de nieve sin precedentes. Los más pobres son los más perjudicados y los que menos posibilidades tienen de afrontar un desastre natural.

Esta Navidad fue literalmente fatal para la región donde está ubicada la ciudad de Buffalo, en el estado de New York.

Las cataratas del Niágara se congelaron parcialmente. Las bajas temperaturas convirtieron el paisaje en distópico, las casas cubiertas de hielo con nieve tapando los ingresos. Se acumuló más de un metro de nieve, haciendo las calles intransitables, dejando atrapadas a las personas en centros comerciales o en sus propios autos regresando a casa.

Según Buffalo News la cantidad de muertos por la tormenta ascienden a 42, aunque se cree que podría ser mayor. Muchos de los muertos fueron encontrados a la intemperie aunque otros murieron en sus casas o atrapados en sus autos.  

Durante el año pasado Estados Unidos experimentó 16 desastres ambientales entre sequías, inundaciones, incendios, tornados, huracanes, granizos y heladas, costando más de 1 billón de dólares cada uno entre operaciones de rescate y reparación de daños (ver mapa).

Fuente: NCEI/NOAA (National Centers for Environmental Information)

La oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca, que administra el presupuesto federal, estima que los desastres naturales costarán a los Estados Unidos alrededor de 2 trillones de dólares al año hacia fines de este siglo, según un artículo de CNBC.

El año pasado luego de arduas y extensas negociaciones se aprobó en ambas cámaras el proyecto de ley llamado Build Back Better Act, que principalmente financia proyectos de infraestructura en todo el país, y que incluye la mayor inversión federal en energía renovable pudiendo reducir las emisiones a la mitad para el año 2030, según estimaciones.

Además, otro proyecto de ley aprobado el año pasado la Ley de Reducción de la Inflación también incluye dinero ($370 billones) para ser invertidos durante la próxima década en proyectos de energía renovable, entre los que se encuentran incentivos para la compra de autos eléctricos y de proyectos de manufactura y tecnología renovables.

A pesar de este influjo de dinero para energía renovable, la Casa Blanca admite que no será suficiente para reducir el impacto en el aumento de la temperatura global. Medidas legislativas para el control de las emisiones de automóviles, camiones e industrias son necesarias para impactar positivamente en esa dirección.

Lamentablemente, como ocurre en el resto del mundo, los desastres naturales afectan a los más pobres. En el caso de la helada de Buffalo, según una investigación del Washington Post, el 51% de las personas fallecidas son afroamericanas, aunque solo conforman el 14% de la población en el condado de Erie, donde se encuentra la ciudad de Buffalo.

Los líderes barriales insisten en que las condiciones estructurales como la pobreza, la falta de supermercados cercanos (food deserts), las malas condiciones habitacionales y la falta de inversión estatal provocan un impacto más grande en comunidades de bajos recursos comparadas con los barrios blancos suburbanos. Allí parecen estar mejor preparados, se ve una mayor coordinación de rescate, y la electricidad fue reestablecida rapidamente.