Por Eugenia Rodríguez, Centro de Economía Política Argentina (CEPA)
Esta semana se conocieron los datos de evolución del empleo registrado privado para el mes de septiembre. Los mismos confirman un sendero de crecimiento sostenido que, sin embargo, no tiene correlato en la evolución del salario real, que se mantiene en niveles de 2019. ¿Cómo analizar esta situación?
En primer lugar, según lo relevado en el Sistema Integrado Previsional Argentina (SIPA), se registran ya 21 meses consecutivos de generación de empleo privado, con 25.289 puestos nuevos en septiembre, 0,4% más que en agosto pasado.
¿Qué implica este número? Ello da cuenta de que más de un año después del piso de la pandemia, en julio 2020, se generaron 439 mil puestos de trabajo, más del 100% del total perdido desde esa fecha (-193 mil). En septiembre, los sectores que impulsaron ese crecimiento fueron Comercio y Construcción.
Sin embargo, es preciso mencionar que aún faltan recuperar unos 47 mil puestos de trabajo, para alcanzar los niveles previos a la crisis del gobierno de Cambiemos, ya que entre abril de 2018 y diciembre de 19 se destruyeron 276 mil puestos de trabajo registrados privados.
Es decir que, incluso habiendo recuperado la totalidad de puestos que existían en 2020, el nivel alcanzado resulta estructuralmente bajo dado que, previo al inicio de la pandemia, el empleo privado ya se encontraba en una situación difícil.
¿Qué pasa en cada sector de actividad? De acuerdo a un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), es posible detectar diferentes velocidades en la evolución de los sectores económicos, aunque cada vez con menores diferencias. Por un lado, aparecen diez sectores dinámicos que tienen ya niveles de empleo por arriba de la crisis del Covid-19, entre los que sobresale Industria e Inmobiliarias, en los que generaron más de 77 mil y 66 mil puestos adicionales respectivamente. Se incorpora a este grupo el sector Turismo, que fue el más afectado durante la pandemia. Incluyendo el mes de septiembre, el sector acumula 15 meses consecutivos de crecimiento de puestos de trabajo, lo que está relacionado principalmente con el impacto positivo del programa Pre-Viaje.
Por su parte, dos sectores se encuentran aún en recuperación, es decir que crean puestos de trabajo desde julio de 2020 pero todavía no llegaron a los niveles de febrero de ese año (Transporte y Servicios Comunitarios y Sociales). Por otro lado, dos sectores permanecen en crisis, con menos trabajadores respecto al piso de la pandemia, es el caso de Agricultura y Finanzas.
¿Qué sucede a nivel regional? El 95% de las provincias registran más empleo privado que en febrero 2020. En ese sentido, la recuperación de los niveles de empleo a nivel nacional es bastante homogénea, destacándose que CABA, Cuyo y el NOA son las regiones que más dificultades presentan para recuperarse, y siendo Tucumán la que aún se encuentra sensiblemente por debajo de los niveles pre-pandemia.
No es menor señalar que esta recuperación del empleo registrado privado se da en un contexto de crecimiento de la actividad económica (4,8% i.a en septiembre) con un leve retroceso en relación a agosto (-0,3%) pero manteniéndose en niveles similares a marzo de 2018.
Dicho lo anterior, al poner la lupa sobre la evolución real de la media (promedio de salarios) y mediana (línea que divide en mitades la cantidad de trabajadoras/es) se observa que el nivel actual se mantiene en valores equivalentes de finales de 2019, es decir, no se ha logrado recuperar nada de lo perdido durante la gestión de Cambiemos.
Si bien la evolución del último mes de la media y la mediana salarial (7,3% y 6,6% respectivamente) quedó por encima de la inflación (6,2%), al mirar la serie larga se observa que, a diferencia del empleo, donde la recuperación de puestos alcanzó el 90% de lo perdido, el poder adquisitivo de las y los trabajadores registrados, que ya había perdido al menos 20 puntos para fines de 2019, y luego sufre el impacto de la pandemia, hoy se mantiene en una situación crítica que es necesario comenzar a revertir.
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