Por Alejandro Gómez
Agustín Navarro tenía 57 años, vivía en el sector YPF con su familia y era coordinador de un merendero, que pertenecía a la organización Barrios de Pie. Luego de haber sido diagnosticado por COVID19, fue aislado en un hotel de Recoleta. El cuadro fue empeorando, ya que Agustín, padecía de problemas respiratorios. Finalmente, fue derivado al Hospital Ramos Mejía donde falleció este lunes.
“Con el avance de la pandemia en los barrios populares, somos los militantes sociales quienes día a día ponemos el cuerpo”.
El Subsecretario de Políticas de Integración y formación de la Economía Social, y líder de la Organización Barrios de Pie, Daniel Menéndez, comunicó a través de un hilo en las redes sociales la triste noticia. Además, se explayó acerca de la situación por la que están atravesando los sectores sociales más vulnerables.
Agustín coordinaba el merendero “Otti”de Somos – Barrios de Pie en la manzana 24 de la villa 31, donde recibía a diario un centenar de chicos a quienes asistían dándoles leche. En las últimas semanas había dejado de participar por su condición de paciente de riesgo. Además, no escapaba a los problemas cotidianos que se viven en el barrio. La falta de agua era sólo uno de ellos. Agustín era padre de dos hijas y un hijo. También, era abuelo. Su familia se encuentra aislada, como lo establece el protocolo. Una de sus hijas tambié dio positivo luego de que le realizaran el test.
Dos de los hijos de Agustín están aislados en hoteles, mientras que la mujer, su hija y sus nietxs están aislados en el barrio, -pero- sin agua.
Según Walter Córdoba, referente de Barrios de Pie, “dos de los hijos de Agustín están aislados en hoteles, mientras que la mujer, su hija y sus nietxs están aislados en el barrio, -pero- sin agua. Le pedimos al Gobierno de la Ciudad que asista a la familia de Navarro”.
La demanda en los comedores se ha triplicado, y no todos reciben la asistencia por parte del estado y los municipios.
En medio de la crisis sanitaria por el coronavirus, el dengue y la falta de agua, los vecinos, la iglesia, organizaciones sociales y agrupaciones políticas, lograron establecer un comité de crisis para afrontar la cuarentena. Es sabido que este sector de la sociedad es uno de los más golpeados.
Hace unos días, Ignacio “Nacho” Levy, referente de La Poderosa, junto a vecinos de los distintos barrios populares, se reunieron en Olivos con Alberto Fernández, algo que el propio Levy calificó como “un gesto simbólico muy importante”. A la vez, resaltó que el Presidente se mostró sorprendido ya que la situación no era como se la transmitían las autoridades nacionales y de la Ciudad.
La falta de respuestas efectivas del gobierno de la Ciudad transforman la situación en un coctel explosivo.
Una semana después de la muerte de Ramona, ocurre la muerte de Agustín. Antes de que esto sucediera se denunció públicamente la situación que se vive en las villas de la Ciudad de Buenos Aires. Las condiciones de hacinamiento, la falta de recursos, la escasez de agua y la falta de respuestas del gobierno de la Ciudad, hacen de esta situación un cóctel explosivo, donde los perjudicados son los de siempre, los más humildes.
