Las cepas más agresivas podrían generar 270 veces más carga viral que el tipo menos potente.

Las cepas más agresivas podrían generar 270 veces más carga viral que el tipo menos potente. Un estudio recién publicado por uno de los principales científicos de China encontró que la capacidad de mutación del Coronavirus fue enormemente subestimada y que diferentes cepas podrían explicar los diferentes impactos de la enfermedad en el mundo.

Este hallazgo podría arrojar luz sobre las diferencias en la mortalidad por región.

Este hallazgo podría arrojar luz sobre las diferencias en la mortalidad por región. Las tasas de infección y mortalidad de la pandemia varían de un país a otro, y se han propuesto muchas explicaciones.
La profesora Li Lanjuan y sus colegas de la Universidad de Zhejiang encontraron dentro de un pequeño grupo de pacientes muchas mutaciones no informadas previamente. Estas mutaciones incluyeron cambios tan raros que los científicos no imaginaron lo que pudiera ocurrir.

También confirmaron, por primera vez,con evidencia sólida de laboratorio, que algunas mutaciones crearían cepas más mortales que otras. El artículo no revisado fue publicado ayer en el servicio de preimpresión de medRxiv.org. De ese portal participa la prestigiosa Universidad de Yale, entre otras instituciones.
Li tomó un enfoque inusual para investigar la mutación del virus. Analizó las cepas virales aisladas de 11 pacientes Covid-19 elegidos al azar de Hangzhou, en la provincia oriental de Zhejiang, y luego probó la eficacia con la que podían infectar y matar células.
Las mutaciones más mortales en los pacientes de Zhejiang también se habían encontrado en la mayoría de los pacientes en toda Europa, mientras que las cepas más leves eran las variedades predominantes que se encuentran en partes de los Estados Unidos, como el estado de Washington, según su documento.

La tasa de mortalidad en Nueva York fue similar y aún peor que la de muchos países europeos.

Nueva York puede tener una cepa más mortal importada de Europa, en comparación con virus menos letales en otros lugares de los Estados Unidos.
Pero la mutación más débil no significa un un riesgo menor para todos, según el estudio de la cientifica. En Zhejiang, dos pacientes de entre 30 y 50 años que contrajeron la cepa más débil enfermaron gravemente. Aunque ambos sobrevivieron, el paciente mayor necesitó tratamiento en una unidad de cuidados intensivos.
Los científicos genéticos habían notado que las cepas dominantes en distintas regiones geográficas eran inherentemente diferentes. Algunos investigadores sospecharon que las tasas variables de mortalidad podrían, en parte, ser causadas por mutaciones, pero no tenían pruebas directas.
El problema se complicó aún más porque las tasas de supervivencia dependían de muchos factores, como la edad, las condiciones de salud subyacentes o incluso el tipo de sangre.

En los hospitales los pacientes reciben el mismo tratamiento independientemente de la cepa que tengan.

Li y sus colegas sugirieron que definir mutaciones en una región podría determinar acciones para combatir el virus. “El desarrollo de medicamentos y vacunas, aunque urgente, debe tener en cuenta el impacto de estas mutaciones acumuladas … para evitar posibles dificultades”, dijeron.

Li fue la primer científica en proponer el bloqueo de  Wuhan, de acuerdo con los informes de los medios estatales. El Gobierno siguió su consejo y, a fines de enero, la ciudad de más de 11 millones de residentes fue cerrada durante la noche.

El equipo de Li detectó más de 30 mutaciones, el 60% de ellas hasta ahora desconocidas.

El tamaño de la muestra en este estudio más reciente fue notablemente pequeño. Otros estudios que rastrean la mutación del virus generalmente involucraron cientos, o incluso miles, de cepas. Con todo, descubrieron que algunas de estas mutaciones podrían conducir a cambios funcionales en la proteína espiga del virus, una estructura única sobre la envoltura viral que permite que el Coronavirus se una con las células humanas. La simulación por computadora predijo que estas mutaciones aumentarían su infectividad.

Las cepas más agresivas generarían 270 veces más carga viral que el tipo más débil. Estas cepas también mataron más rápidamente a las células.

Para verificar la teoría, Li y sus colegas infectaron células con cepas que portaban diferentes mutaciones. Fue un resultado inesperado de menos de una docena de pacientes, “lo que indica que la verdadera diversidad de las cepas virales todavía se subestima en gran medida”, escribió Li en el documento. Las mutaciones fueron genes diferentes de la cepa más temprana aislada en Wuhan, donde el virus se detectó por primera vez a fines de diciembre del año pasado.

El Coronavirus cambia a una velocidad promedio de aproximadamente una mutación por mes.

 Para el lunes, científicos de todo el mundo habían secuenciado más de 10,000 cepas, que contenían más de 4,300 mutaciones, según el Centro Nacional de Bioinformación de China. Sin embargo, la mayoría de estas muestras fueron secuenciadas por un enfoque estándar que generaría un resultado rápido. Los genes se leyeron sólo una vez, por ejemplo, y había lugar para errores. El equipo de Li usó un método más sofisticado, conocido como secuenciación ultra profunda. Cada bloque de construcción del genoma del virus se leyó más de 100 veces, lo que permitió a los investigadores ver los cambios que el enfoque convencional podría haber pasado por alto.
Los investigadores también encontraron tres cambios consecutivos, conocidos como mutaciones de tri-nucleótidos, en un paciente de 60 años, lo cual fue un evento raro. Por lo general, los genes mutaron en un sitio a la vez. Este paciente pasó más de 50 días en el hospital, mucho más tiempo que otros pacientes de Covid-19, e incluso sus heces eran infecciosas con cepas virales vivas. “Investigar el impacto funcional de esta mutación de tres nucleótidos sería muy interesante”, dijeron Li y sus colegas en el documento.
El profesor Zhang Xuegong, jefe de la división de bioinformática del Laboratorio Nacional de Ciencia y Tecnología de la Información de la Universidad de Tsinghua, dijo que la secuenciación ultra profunda podría ser una estrategia efectiva para rastrear la mutación del virus. Pero este enfoque podría ser mucho más lento y costoso.

“Si hay un descubrimiento que anula la percepción predominante, no se sorprenda”.

“Nuestra comprensión del virus sigue siendo bastante superficial”, dijo Zhang. Preguntas como la procedencia del virus, por qué podría matar a algunos jóvenes sanos sin generar síntomas detectables en muchos otros, provocan en los científicos un enorme interrogante.