Desde Berlín
Emotivo homenaje a los soldados del Ejército Rojo que derrotaron a la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
Con el trasfondo de la guerra en Ucrania los residentes rusos y también berlineses, se acercaron al monumento de Guerra Soviético con un clavel rojo. La flor de este color simboliza la victoria.
El acto se realizó en el parque Treptow-Köpenick de Berlín donde se encuentra emplazada la estatua principal. Se trata de una escultura de un soldado soviético sosteniendo a una niña alemana, y con la esvástica destruida bajo su espada.
El contexto este año fue diferente . La guerra en Ucrania ha generado muchas discrepancias incluso entre los rusos. La convocatoria tuvo el pedido explícito por parte de las autoridades locales de no llevar banderas para no generar molestias con los miles de ucranianos que se encuentran refugiados en Berlín. Aunque el hecho conmemorado y la actualidad política y bélica en el continente son distintas, muchos igualan las circunstancias históricas actuales con las de hace 77 años. El canciller alemán Olaf Scholz, en un discurso bastante duro contra el presidente Vladimir Putin, intentó acercar el proceder del “nazismo” con el comportamiento del mandatario ruso. “Nie wieder” (Nunca Más) reiteró varias veces el líder de los socialdemócratas en Alemania.
El dispositivo de seguridad en la zona del parque fue sorprendente como si se hubiese tratado de una movilización con objetivos de ataques o agresiones. Cada año se realiza esta conmemoración con el único sentido de homenajear a los soldados. Ninguno de los participantes lanzó críticas ni levantó carteles ofensivos contra los ucranianos. La ceremonia estuvo marcada por la memoria de aquellos años feroces. Los concurrentes dejaron sus claveles rojos al pie del monumento.
No fue masiva la participación como en otros años destacaron las personas que se acercaron al homenaje, entre ellas, adultos mayores y jóvenes estudiantes. Dentro de los movimientos de izquierda en Alemania también hay diferencias con respecto al conflicto en Ucrania. Este puede ser uno de los motivos por los que muchos decidieron no participar.
Hoy la Unión Europa se encuentra en una difícil situación económica y social. La guerra otra vez en la región genera dolor pero también impotencia por parte de algunos europeos que no adhieren a la posición política que el bloque tomó contra Rusia. Entienden que las causas de este conflicto son bastante ajenas a Europa y que más bien responden a los intereses de EEUU y la OTAN en conformar un nuevo orden mundial.
