Grupos conservadores de Estados Unidos, buscan prohibir la literatura “woke” en las escuelas y las bibliotecas públicas en otra ofensiva en la saga de la guerra cultural. Libros con temáticas LGBT, violencia sexual, racismo, drogas, sexo y aborto, son considerados no aptos para permanecer en las estanterías de las bibliotecas, según grupos de facebook como No left turn in education.
“Eliminar la realidad de la currícula retirando libros de nuestra biblioteca no creará buenos ciudadanos”
En un audio publicado por NPR durante una reunión del Consejo Educativo en Kansas City, entre los comentarios del público se encontraba una estudiante de secundaria, que dijo: “Eliminar la realidad de la currícula retirando libros de nuestra biblioteca no creará buenos ciudadanos. No podemos sentir que pertenecemos aquí cuando nuestras voces están silenciadas”.
Según la Asociación Americana de Bibliotecas el intento de censura de libros ha aumentado en un 67% comparado al año anterior. En Texas por ejemplo, un legislador republicano introdujo un proyecto de ley para que las bibliotecas públicas, retiren unos 850 libros de sus estantes.
La vocera de la Asociación de Bibliotecas de Texas, dijo en una entrevista para CNN, que nunca había visto tan marcado interés por parte de funcionarios públicos, por los libros que se encuentran en las bibliotecas. La presión y acoso que sienten los bibliotecarios es tal que esta Asociación abrió una línea de teléfono para que pudieran denunciar acosos o amenazas. En este mismo video de CNN los bibliotecarios de Texas aparecen con sus caras sin luz durante la entrevista, para no ser reconocidos y amenazados por padres de familia.
Este miedo no es infundado, funcionarios públicos durante y post elecciones presidenciales fueron y siguen amenazados por seguidores de Trump, que creen que las elecciones fueron fraudulentas. Además, funcionarios de los Consejos educativos alrededor del país, también están siendo amenazados por no querer quitar de la currícula, temas como la teoría crítica de la raza, que argumenta sobre las condiciones estructurales del racismo.
Este intento de censura literaria es otra muestra de la resistencia que ejercen grupos conservadores que no quieren cambio, no quieren perder sus privilegios, son los mismos se rehúsan a la creación de los “baños neutrales”, para ser usados por quienes no se sienten cómodos con los tradicionales baños para mujeres y baños para hombres,. Son también quienes rechazan, que niños y adolescentes transgénero participen en competencias deportivas, con menores de su género elegido.
El paso de Trump por la presidencia de los Estados Unidos, exacerbó la grieta made in USA.
Son los mismos que denuncian públicamente a los demócratas de tener políticas de “fronteras abiertas”, para que ingresen irrestrictamente migrantes, (lo cual no es cierto). Esta no es más que otra muestra, de la ola autoritaria que se ve de manera cada vez más transparente, en estos últimos años, El paso de Trump por la presidencia de los Estados Unidos, exacerbó la grieta made in USA.
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