Bolivia en la mirada de Gregorio Selser
Por Julio Ferrer *
El golpe de Estado cívico militar del 10 de noviembre último contra el Estado Plurinacional que lideraba Evo Morales y su vice Alvaro García Linera del partido MAS (Movimiento al Socialismo), quienes habían obtenido una nueva victoria en las elecciones presidenciales últimas, fue ejecutada a la vieja usanza imperialista del Departamento de Estado norteamericano: financiamiento por medio de la embajada de los Estados Unidos en Bolivia y otros servicios de inteligencia, para los mercenarios “cívicos” como Fernando “Macho” Camacho, y otros “empresarios” de las elites bolivianas racistas, fascistas, separatistas de Santa Cruz de la Sierra, sumado a la eterna herramienta de colonización del imperio que es la OEA, esta vez al mando de Luis Almagro, artífice de la diplomacia internacional para desestabilizar al gobierno de Evo Morales con un informe preliminar donde no figura la palabra fraude, sino algunas irregularidades en el proceso electoral.
Una vez más, un proceso de emancipación y revolución social como el que estaba llevando adelante el líder indígena Morales, fue destrozado a sangre y fuego por la mano siniestra de los Estados Unidos y sus aliados. Sin saber todavía cuál será el futuro del país hermano y sus principales dirigentes exiliados forzosamente.
Este nuevo golpe militar me hizo releer las investigaciones del maestro de periodistas, Gregorio Selser, autor de 50 libros sobre la realidad y las luchas de los pueblos de América Latina y el Caribe, donde revelaba las distintas herramientas de penetración y dominación política de los Estados Unidos en América Latina y el Caribe como los golpes de Estado, los planes de la CIA y el Pentágono, las alianzas entre las distintas administraciones norteamericanas con las oligarquías y burguesías locales cipayas que profundizaban la dependencia de los pueblos de toda América.
Selser escribió dos libros sobre Bolivia: La CIA en Bolivia (Editorial Hernández), escrito por Selser en 1970, a poco de finalizada la guerrilla de Ñancahuazú, revela cómo el organismo de espionaje norteamericano dominaba los distintos organismos y funcionarios del Estado boliviano.
Un proceso que había comenzado en 1967, cuando los agentes de la CIA llegaron al país andino para colaborar en las tareas de infiltración y represión del movimiento guerrillero del Che Guevara que llevara adelante la dictadura del general René Barrientos.
Tres años más tarde, el 24 de enero de 1970, cinco funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en Bolivia abandonaron precipitadamente el país. Se adelantaban así a que se los declarara personas no gratas, en vista de que pocas horas antes el ministro de Gobierno boliviano, coronel Juan Ayoroa, había anunciado el descubrimiento de “un centro de operaciones y control telefónico que era utilizado por la CIA”.
En este libro, Selser investiga la historia de esos casi tres años de la CIA en tierras bolivianas.
En el libro Bolivia. El cuartelazo de los cocadólares” (Editorial Mex-Sur, 1982) Selser, desmenuza los tres años, desde el 1º de noviembre de 1979 hasta el 10 de octubre de 1982 (horas antes de que asuma la presidencia de Bolivia, el doctor Hernán Siles Zuazo), en donde las fuerzas armadas de Bolivia sumieron al pueblo en la pérdida de todos sus valores y derechos y reveló los vínculos de la junta militar golpista que asoló a Bolivia con el narcotráfico internacional.
También allí escribió una especie de prólogo el periodista y legislador Cayetano Llobet, amigo de Gregorio, haciendo un breve análisis sobre la situación política social y económica del país andino, y expectante -aunque alerta- de lo que se avecinaba con el nuevo gobierno de Hernán Siles Zuazo, en 1982.
Cabe señalar que Llobet estuvo con el prestigioso periodista y escritor boliviano, Marcelo Quiroga Santa Cruz, el 17 de julio de 1980, al producirse el sangriento golpe protagonizado por García Meza y Arce Gómez. Ese mismo día Quiroga Santa Cruz fue herido y apresado por militares argentinos durante el asalto a la Central Obrera Boliviana (COB), quienes lo condujeron al Estado Mayor del Ejército y lo asesinaron, desapareciendo luego sus restos.
En otros artículos, Selser denunció el paso de personajes tan siniestros como Klaus Barbie, el llamado “carnicero de Lyon”, y otros nazis alemanes y croatas por la zona de Santa Cruz, que dejaron redes con los servicios de inteligencia de Estados Unidos y Bolivia y del narcotráfico en gran escala.
Selser denunciaba que para toda época, el imperialismo norteamericano implementaba para América Latina La Doctrina Monroe de 1823: “América para los americanos”, junto al proyecto geoestratégico de recolonización de nuestra región. El golpe de Estado en Bolivia, se da en ese marco.
Hoy, Gregorio Selser estaría denunciando las intervenciones norteamericanas de “garrote” y “diplomáticas” y estaría sentado junto al líder derrocado Evo Morales y su pueblo, luchando y resistiendo.
*Su último libro Gregorio Selser. Una leyenda del periodismo latinoamericano (2018) Con prólogo de Stella Calloni y con sello en conjunto por la EDULP (Ediciones de la Universidad de La Plata) y EPC (Ediciones de Periodismo y Comunicación de la Facultad de Periodismo de La Plata).