En los barrios

San Miguel del Monte: Gatillo fácil, homicidio doblemente agravado y encubrimiento

Cuatro de los siete policías detenidos por la masacre de San Miguel del Monte, fueron acusados de “homicidio doblemente agravado por abuso de su función como miembros fuerzas policiales y por el empleo de armas de fuegos”, por la jueza Marcela Inés Garmendia: son el capitán Rubén García (48) y los oficiales Leonardo Ecilape, Manuel Monreal y Mariano Ibañez, Es decir, para la Justicia, los disparos policiales ya son un hecho. Además, Cristian Righero, José Domínguez y Juan Gutiérrez, también policías de la comisaría de Monte, fueron acusados de falsedad ideológica y encubrimiento agravado.

Está confirmado que el Fiat 147 conducido por Aníbal Suárez (22 años) fue baleado por la policía, lo que provocó a su vez el choque contra el camión, causándole la muerte a cuatro jóvenes, tres de ellos menores de edad, y lesiones gravísimas a otra adolescente. Ayer se concretó la detención de siete policías detenidos. “Tenemos virtualmente concentrada toda la prueba en la primera etapa histórica cronológica y creemos que está acreditado que las muertes se produjeron por una fuerte colisión del automóvil con un acoplado, y esa colisión, a su vez, fue producida por la desestabilización del auto que se generó por la persecución de un móvil policial y los disparos que se produjeron”, declaró el procurador general bonaerense, Julio Conte Grand.

El abogado Marcelo Lafolla, de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), explicó que los imputados “en algunos casos lo son por su participación (directa) en el hecho, y otros por lo que dijeron en la instrucción policial, en el ámbito de las dependencias policiales, -que- difieren de las que se tomaron en sede judicial”. Según parece, “tomaron mal las declaraciones con intencionalidad, no por error, y eso complejiza la situación”. El fiscal le confirmó a Página 12 que, por ejemplo, cuando los testigos decían “disparos” los instructores policiales asentaban “estruendos”.

Además, Conte Grand confirmó que tanto el disparo que tiene en el glúteo una de las nenas como los otros casquillos encontrados, corresponden a armas de fuego de la policía. Más específicamente, aunque no lo haya explicitado, de un arma de la Bonaerense. Como si fuese poco, los efectivos trataron de encubrir el hecho: “Uno de los cuerpos tiene un orificio de ingreso de proyectil calibre 9 milímetros y ese proyectil se corresponde con el arma de uno de los efectivos que estaba dentro del móvil y que está detenido con otros seis”. No terminó allí el accionar de la policía, también hubo encubrimiento: “Se encontraron cuatro casquillos de bala que se corresponden con el arma de otro de los efectivos. Las armas fueron entregadas y todas tenían los cargadores completos, lo que indica un comportamiento claramente disuasorio por parte de los policías”. Finalmente, aseguró que “participaron otros dos móviles” y que en la etapa posterior hubo “intento de encubrimiento” policial.

El padre de Danilo, Juan Carlos Sansone, ya le había contado a Agenda Sur, el mismo día de la tragedia, que se habían llevado “el auto. En seguida se llevaron todo, tenemos todo gravado con los celulares, quisieron tapar todo”.

Hoy se realizó un reclamo de la comunidad de San Miguel del Monte exigiendo justicia. Al mismo tiempo, en la Ciudad de Buenos Aires, se realizó una movilización de Congreso a Plaza de Mayo organizada por los Familiares de la Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil.