Observando la reacción violenta por parte del Gobierno jujeño hacia sus ciudadanos, es fácil trazar una línea directa con el comportamiento desproporcionado que el Gobierno de Georgia impone a su ciudadanía, aun escapándose de los límites democráticos. Tanto en Jujuy como en Georgia, las dirigencias quieren imponer proyectos a sus ciudadanos que impactan en sus vidas, sin su consentimiento y a pesar de su resistencia.

Campo de entrenamiento policial

En la ciudad de Atlanta, Estado de Georgia, fue aprobado en el año 2021 por el consejo de la ciudad un proyecto billonario para la construcción de una mini ciudad de entrenamiento policial, destruyendo para ello 400 hectáreas de bosque. Según sus opositores, este campo servirá para militarizar la policía, además de destruir el bosque Weelaunee, la única área boscosa con la que cuenta la ciudad de Atlanta.

Atlanta resiste

Entre los actos de resistencia, hubo un grupo de ambientalistas que se hacían llamar “defensores del bosque”, quienes acamparon durante meses para evitar la entrada de maquinarias para la construcción. Este acampe fue violentamente desalojado por la Guardia Nacional.
Allí, un militante fue asesinado de 14 balazos. La policía se quitó las cámaras reglamentarias antes de ingresar al sitio de acampe. El resto de los militantes medioambientalistas fueron detenidos e imputados con cargos de terrorismo doméstico. Aquí, en Jujuy, el cargo es el de sedición. Estos tipos penales tienen en EEUU un máximo de pena de 35 años de cárcel.
Otro evento de resistencia fue un festival de música en un parque público. Allí también fueron arrestadas personas con los mismos cargos anteriores. Entre ellas se encuentra un observador legal proveniente de la organización llamada Sourthern Poverty Center, que se encarga de monitorear que los derechos de los arrestados se cumplan. En Jujuy, los abogados de los pueblos originarios son perseguidos, y Alberto Nallar, detenido.
A pesar de que el fiscal del distrito de DeKalb pidió levantarle los cargos de terrorismo doméstico, el fiscal del Estado de Georgia anuló su pedido.
Además, un grupo Swat de la policía de Atlanta realizó un violento arresto en la casa de un grupo de activistas. Éstos recaudaban fondos para pagar la defensa legal y las fianzas de las 42 personas que fueron arrestadas hasta ahora, imputados con cargos de fraude y lavado de dinero.
Durante una entrevista realizada por Democracy Now,  Kamau Franklin, fundador de la organización Community Movement Builders dijo: “…este uso de la violencia en contra de Atlanta Solidarity Fund demuestra las reales intenciones, que no tienen nada que ver con asuntos criminales…Esto es realmente otra forma de destruir y atacar la infraestructura del movimiento organizado en contra de Cop City.”
En una próxima medida, un grupo de ciudadanos de Atlanta juntan firmas para la realización de un referéndum para dirimir este proyecto entre la ciudadanía.

Mismas tácticas opresivas, mismo lenguaje denigrante

El gobernador Brian Kemp, como el gobernador Gerardo Morales, hicieron uso de sus poderes para reprimir la resistencia de formas que se salen del marco de la democracia.
En Jujuy, las camionetas sin patentes, las entraderas de la policía en casas particulares para detener personas sin la orden judicial correspondiente y las torturas sufridas por los manifestantes en el Penal de Alto Comedero, replican “La Noche del Apagón” durante la última dictadura cívico- militar. Precisamente, la marcha de este jueves en contra de la represión de Morales se realiza el mismo día de la conmoración de la noche cuando secuestraron trabajadores del ingenio Ledesma, entre otras empresas.
Paralelamente, en Georgia, en enero de este año se declaró “el estado de emergencia”, lo cual habilitó al llamado a la Guardia Nacional para apoyar a la policía local y estatal para mitigar la protesta. Aumentó así la tensión y provocó incidentes violentos y arrestos masivos. El gobernador Kemp desacredita a los protestantes, refiriéndose a ellos como “agitadores que vienen de afuera del Estado, quienes traen violencia a nuestra ciudad capital.” Morales los califica de “Kirchneristas” –como si fuese un delito-, seguidores de Milagros Sala y que, además, llegaron a Jujuy desde Buenos Aires.
Tanto la policía, como los fiscales y el propio gobernador declaran en los medios que la oposición a Cop City está asociada con el trabajo de una organización criminal, cuyos miembros conspiran para cometer actos de terrorismo. 
A pesar de la presencia ciudadana en las reuniones de los concejales demostrando su oposición, de actos de protesta, incendio de autos policiales y protestas frente al sindicato de policías de Atlanta, uno de los principales organismos que apoyan este proyecto, la empresa derriba árboles para comenzar la construcción del campo de entrenamiento. 
El Gobernador Kemp proviene de un Estado que pertenecía a la Confederación, conjunto de Estados esclavistas. Son éstos, de la región sur de los Estados Unidos, gobernados por el partido Republicano gracias a la supresión del voto. Allí hay muchos requisitos para que la gente se pueda registrar para votar, como la presentación de varios documentos para demostrar la identidad del votante, o realizar el trámite en persona, entre muchas otras tácticas para que una porción de la población no pueda votar. En general, estas tácticas están dirigidas a personas de bajos recursos o personas de color, quienes mayormente votan al partido Demócrata.

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https://www.democracynow.org/2023/3/14/cop_city_wrongful_death

https://www.politico.com/news/2023/01/27/kemp-cop-city-protests-emergency-00079846