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Perú sigue sin presidente

Tras la renuncia de Manuel Merino el Congreso aún no acordó la elección de otro mandatario.

77 de los 130 congresistas, entre ellos fujimoristas y diputados de derecha, boicotearon la elección de la lista encabezada por Rocío Silva Santisteban para constituir la presidencia o Mesa directiva. Se trata de una de las congresistas que votó en contra de la destitución de Martín Vizcarra.
Manuel Merino renunció este domingo en una comparecencia que duró poco más de cinco minutos. El parlamento lo había designado presidente interino tras la destitución de Vizcarra el pasado lunes. Sus aliados le soltaron la mano, los mismos que votaron a favor de la salida del expresidente.

La crisis institucional en Perú se agravó este fin de semana con la muerte de dos jóvenes universitarios en las protestas contra el Gobierno.


El proceso destituyente “exprés”, fue cuestionado por gran parte del arco político; y la comunidad internacional no reconoció a Merino como mandatario. La maniobra fue calificada por muchos como “golpe parlamentario”.
La crisis institucional en Perú se agravó este fin de semana con la muerte de dos jóvenes universitarios en las protestas contra el Gobierno. Las manifestaciones fueron reprimidas brutalmente por la policía. Decenas de personas resultaron heridas y organizaciones de DD.HH. denunciaron detenciones arbitrarias.
Tras la noticia de la renuncia de Merino, el clima en las calles se tornó festivo. Y ahora todo dependerá, otra vez, de la decisión que tome el Gongreso. El parlamento tendrá que designar a otro presidente para que complete el el mandato establecido hasta julio de 2021. Todo supone que el o la elegida saldrá del grupo de congresistas que no votó a favor de la destitución de Vizcarra. Con esta decisión se busca calmar la tensión social. El descontento de la ciudadanía va más allá de un mandatario o partido: la sociedad civil rechaza el funcionamiento del Congreso cuyos integrantes en su gran mayoría están implicados en causas de corrupción y, pese a esto, son los encargados de elegir el rumbo del país.
El vacío de poder podría llegar a beneficiar a Vizcarra. El Tribunal Constitucional (TC) deberá resolver si la figura de “incapacidad moral permanente” por la que ha sido destituido, fue bien aplicada. Este lunes el TC se reunirá de emergencia para analizar el tema. Vizcarra está acusado de haber recibido sobornos cuando era gobernador entre 2011 y 2014.
Una vez más, el país está en suspenso y la decisión en poder del Congreso. En abril habrá elecciones, pero para eso falta una eternidad.

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